«Al igual que muchas compañías que trabajan en el espacio público, queremos adaptar nuestros espectáculos al entorno en el que se presentarán. Desarrollamos esta reflexión, teniendo en cuenta que los habitantes que pueblan este entorno en el que vamos a evolucionar, nos hacen aparecer los colores sobre los que tendremos que estar de acuerdo. Ellos son nuestro círculo de color »
Esta compañía busca crear aventuras humanas en torno a la implementación de los espectáculos de la Compañía, provocar emociones intensas dentro de esta implementación, para constituir el espacio propicio para los encuentros más delicados, los más improbables, agitar el ritmo de vida de un distrito, una ciudad, un pueblo, elevar a sus habitantes a la altura de estos gigantes que construyen, acompañarlos, desarrollarlos.
Está en el corazón del trabajo de la Compañía, la colaboración con los habitantes de los lugares donde nos instalamos. Existe el deseo de transformar el espacio público a favor de imágenes poéticas y de ensueño. Hay lentitud, la búsqueda de la ligereza. Existe la profunda convicción de que donde se desarrolla la acción cultural, es mejor vivir juntos. Hay una delgada línea entre la fantasía y la realidad. Hay historias de gigantes, historias de personas pequeñas, historias de hombres de hecho. No hay ‘él fue una vez’, tampoco hay ‘FIN’. Hay poemas y pinturas en movimiento. Hay poesía, porque ¿qué más?
